Por primera vez se abre una mirada a la verdad sobre el dopaje en el deporte español, un contexto donde el silencio, la ausencia de leyes específicas y la total inercia de la justicia deportiva y ordinaria (como en el caso de los famosos Operación Puerto) han impedido toda verificación de los hechos durante al menos veinte años. Reabrir la dramática historia de los años 90 es la todos los días El País que recuperó (por el momento sólo en parte) el testimonio clasificado prestado en 2016 por el médico deportivo Luis García del Moral (suspendido de por vida por la agencia antidopaje estadounidense Usada por su implicación en el asunto Armstrong) ante una comisión de la Corte de Arbitraje Deportivo (Cas).
Por primera vez, un médico presentó pruebas contra una federación nacional (la de ciclismo) y documentó financiación destinada al dopaje los representantes de la pista con fondos provenientes del Consejo Superior de Deportes (CSD) y por ende del Estado. Médico de la selección española de 1993 a 1998, Del Moral entregó a la comisión recibos de gastos de compra de medicamentos, pago de exámenes y consultas médicas en preparación para los Juegos de Atlanta de 1996.
El gasto global en medicamentos ascendió aproximadamente a 14 millones de pesetas (80 mil euros) e incluyó también la adquisición, con recetas regulares firmadas por el propio Del Moral y con aprobación federal, de eritropoyetina y hormonas de crecimiento. Los documentos de gastos incluyen también 4 millones de pesetas (25.000 euros) pagados al célebre médico italiano Michele Ferrari, también suspendido de por vida por el asunto Armstrong. Del Moral también incluyó en su cuenta de gastos los viajes para encontrarse con el médico emiliano en Italia.
Preguntado al respecto, Juan Serra, expresidente de la Federación Española de Ciclismo, explicó: “Ciclistas y amigos en común me pidieron que contactara con Ferrari.. Le hice trabajar con nosotros, lo cual fue muy difícil. […] Ganó mucho dinero. Tan pronto como supe a cuánto ascendían los costes de mantenimiento de Ferrari, inmediatamente busqué un presupuesto para cubrirlos. Me puse en contacto con Caja España (una gran institución bancaria, ed) y cubrié los gastos médicos con ellos». Luisi García Del Moral admitió «haber violado frecuentemente el juramento hipocrático» al administrar sustancias dopantes a deportistas.» Todas las infracciones, deportivas y penales, están prescritas.
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