MADRID – “Cinco años de Sánchez ya es mucho tiempo. Pero nueve o diez años de Sánchez, una década de Sánchez, España no lo aguantaría”: Alberto Feijóo, líder de la oposición en el país ibérico como presidente del Partido Popular (PP), es duro en su juicio, ante la actual momento de su principal rival político, el líder de los socialistas, ahora en el gobierno Feijóo pretende presentar su formación como la «única alternativa» y -en una entrevista con Europa Press- dice estar preparado, si las próximas políticas tienen éxito, para «modificar» o «derogar» leyes en áreas como la educación, la memoria, la democracia o los derechos de las personas transgénero.

Uno de los mensajes recurrentes del líder popular es que no asumió su actual cargo -obtenido el pasado mes de abril- «para crear tensión o división». Al contrario, dice él mismo, su objetivo es «defender a la mayoría de los españoles». Por tanto, añade Feijóo, el Partido Popular está dispuesto a «intentar pactos» con los socialistas (PSOE). «Estamos aquí para hacer nuestro aporte», dijo en la entrevista, concedida con motivo del regreso político tras las vacaciones.

Según Feijóo, uno de los problemas del Partido Socialista es que «se ha convertido en el partido de Sánchez» y ya no es del que «hablaba» cuando era gobernador de Galicia. “Hoy, lamentablemente, no es un partido reconocible en el espectro electoral”, añade.

Respecto a las medidas del actual Gobierno de centroizquierda PSOE-Unidas Podemos, Feijóo dice: “Tenemos que cambiar las políticas educativas. Necesitamos cambiar las políticas sobre la memoria democrática”. En estos ámbitos, los populares critican la reforma del mecanismo por el que un alumno supera o no el curso escolar y que a cambio del apoyo parlamentario a la nueva norma para las víctimas del franquismo, el Gobierno pactara con el vasco separatistas de Bildu.

Sobre la Ley Trans, además, la sentencia es clara: «Ni las feministas ni los colectivos a los que va destinada están de acuerdo: es un planteamiento exclusivamente ideológico de una parte minoritaria del Gobierno impuesto a la sociedad española», dice Feijóo, que prefiere para evitar una lista detallada de leyes que le gustaría derogar por ahora.

Un punto de la entrevista que ha suscitado especialmente debate es la promesa de Feijóo de establecer, si llega a ser primer ministro, un «protocolo» sobre el uso del Falcon, el avión presidencial. “Nunca lo usaré para eventos políticos”, dice Feijóo, quien acusa al actual gobierno de despilfarro excesivo en términos de gasto.

Este ataque provocó una rápida respuesta de los socialistas. «Todos los españoles sabemos que el señor Feijóo prefiere yates o aviones financiados por algunos de sus amigos financieros», dijo la portavoz del partido, Pilar Alegría, sobre las últimas noticias sobre el actual líder popular que han desatado la polémica.

redacción madrileña