El gobierno español ha rechazó la solicitud de aplazamiento de la entrada en vigor del impuesto especial sobre los envases de plástico no reutilizables, que se aplicó definitivamente el 1 de enero, propuesta por las organizaciones de los principales sectores consumidores, a la que se añadió FEPEX, y que tendrá un efecto negativo en la comercialización de frutas y hortalizas.

España será el único país europeo en integrar el impuestoque no es de obligado cumplimiento para los Estados miembros y que supondrá costes adicionales para las empresas en un contexto económico internacional complicado como el actual, en el que el sector hortofrutícola se enfrenta a múltiples retos para mantener su sostenibilidad y competitividad, y en un escenario incierto debido al aumento de los costes de producción y la fuerte competencia de terceros países.

FEPEX, al igual que el resto de organizaciones de los principales sectores de consumo que suscribieron la carta dirigida al Gobierno solicitando una moratoria fiscalestá firmemente comprometida con la reducción de los plásticos de un solo uso, pero cree que el impuesto llega en el peor momento.

Las organizaciones firmantes de la petición: ACES, ACOTEX, ADELMA, AECOC, AFEB, ANGED, ASAJA, ASEDAS, Cooperativas Agroalimentarias, FECE, FIAB, Foro Interalimentario, Marcas de Restauración y Stanpa y FEPEX, declararon que las empresas españolas van por delante en legislación relativa a su compromiso con el medio ambiente. La mayoría de empresas ya han tomado medidas como el rediseño, la reducción de peso o la reutilización para intentar minimizar la presencia de este material en sus envases.

FEPEX está especialmente preocupada por la incertidumbre creada por las dudas suscitadas sobre el alcance, las obligaciones formales, así como la inscripción en el registro territorial y la contabilidad y llevanza de los registros de las existencias incluidas en el impuesto.