España propone organizar una minicumbre, en la que participarán los jefes de Estado y de Gobierno de los países del norte del Mediterráneo, cuando asuma la presidencia semestral del Consejo de la UE en el segundo semestre de 2023.

La propuesta de la minicumbre fue presentada por el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, durante la rueda de prensa del jueves en el séptimo foro regional de la Unión por el Mediterráneo (UpM) en Barcelona.

La agenda euromediterránea es un tema que España quiere poner en el centro de su programa de Presidencia de la UE, como dijo Albares.

“Nuestra tarea común es crear un vasto espacio de estabilidad y prosperidad compartida”, dijo la ministra, y agregó que la cooperación española en la región del Mediterráneo se renovará para centrarse en los jóvenes.

Para la UE, la prioridad ahora es proteger a los ciudadanos de los efectos sociales y económicos de la guerra en Ucrania, dijo, y agregó que el foro de la UpM en Barcelona es una herramienta «insustituible» para lograr una mayor cohesión en la región.

La iniciativa de España de organizar una minicumbre mediterránea ya ha sido bien recibida por el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, quien ha recordado que han pasado «muchos años, demasiados» desde la última vez que se celebró una reunión de este tipo.

Por su parte, Albares también se pronunció sobre la guerra de Ucrania y reiteró la posición de España: impulsar el diálogo y aumentar la labor diplomática como la mejor vía para resolver cualquier conflicto que «pueda surgir en cualquier país de la comunidad internacional».

Todo lo que hace el gobierno y los socios europeos «tiene un solo objetivo: llevar la paz a Ucrania lo antes posible, y para ello los soldados rusos deben regresar dentro de las fronteras de la Federación de Rusia», agregó.