El pueblo de Villamanta, en la Comunidad de Madrid, se encuentra inmerso en una operación de rescate y limpieza después de que lluvias torrenciales provocaran graves inundaciones que dejaran al menos tres muertos y tres desaparecidos en toda España. Los vecinos de Villamanta, sin agua ni luz, están repostando combustible a un camión cisterna y tienen que afrontar importantes daños. “Ya tengo 74 años y nunca había visto daños como este año”, dijo el residente Miguel Ángel Núñez. Las calles del pequeño pueblo están cubiertas de barro y escombros y muchos coches han sido arrastrados por las aguas. Los residentes ahora están tratando de coordinarse para limpiar la ciudad juntos.
El pueblo de Villamanta, en la Comunidad de Madrid, se encuentra inmerso en una operación de rescate y limpieza después de que lluvias torrenciales provocaran graves inundaciones que dejaran al menos tres muertos y tres desaparecidos en toda España.
Los vecinos de Villamanta, sin agua ni electricidad, se abastecen de un camión cisterna y tienen que afrontar importantes daños. “Ya tengo 74 años y nunca había visto daños como este año”, dijo el residente Miguel Ángel Núñez. Las calles del pequeño pueblo están cubiertas de barro y escombros y muchos coches han sido arrastrados por las aguas. Los residentes ahora están tratando de coordinarse para limpiar la ciudad juntos.
La borrasca del fin de semana afectó a casi todo el país, registrándose las precipitaciones más intensas el domingo en las provincias costeras de Cádiz, Tarragona y Castelló, según la oficina meteorológica nacional Aemet.
Los vecinos de la Comunidad de Madrid recibieron el domingo un mensaje de emergencia en español e inglés acompañado de una alarma sonora advirtiéndoles de no utilizar vehículos y quedarse en casa debido al «riesgo extremo de tormentas». Fue la primera vez que las autoridades utilizaron este sistema de alerta por teléfono móvil.
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